y trastornaré el trono de los reinos, y destruiré la potencia de los reinos de las naciones, y volcaré los carros de guerra y los que van en ellos; y caerán los caballos y sus jinetes, cada uno bajo la espada de su hermano.
El Señor ha extendido su mano sobre el mar, ha sacudido los reinos: Jehová ha dado mandamiento respecto de la nación mercante, para destruir sus plazas fuertes.
Será el más despreciable de los reinos; y no se alzará más sobre las naciones: porque yo los disminuiré, para que no vuelvan a tener dominio sobre las naciones.
Mira que yo te pongo hoy sobre las naciones y sobre los reinos, para desarraigar, y para derribar, y para arruinar, y para destruir completamente; para edificar también y para plantar.
Y los entregaré al maltratamiento entre todos los reinos de la tierra, a causa de Manasés hijo de Ezequías, rey de Judá, con motivo de lo que él hizo en Jerusalem.
juntamente con todo lo relativo a su reinado, y sus hazañas, y los tiempos que pasaron sobre él, y sobre todo Israel, y sobre todos los reinos de las tierras vecinas.
Los profetas que ha habido antes de mí y antes de ti, de tiempos antiguos, profetizaron contra muchos países y contra grandes reinos, respecto de guerra y de calamidad y de peste.
Acerca de Cedar, y acerca de los reinos de Hazor, a los que hirió Nabucodonosor rey de Babilonia. Así dice Jehová: ¡Levantaos, subid contra Cedar, y despojad a los hijos de Oriente!
He aquí que estoy contra ti, dice Jehová de los Ejércitos, y descubriré tus faldas delante de tu mismo rostro; y haré que vean las naciones tu desnudez, y los reinos tu vergüenza.
Pues sucederá que al fin de los setenta años, Jehová visitará a Tiro; y ella volverá a su lucro, y tendrá comercio con todos los reinos del mundo, sobre la haz de la tierra.
Y de esta manera me respondió: La cuarta bestia será el cuarto reino en la tierra, el cual será diferente de todos los reinos, y devorará toda la tierra, y la hollará, y la desmenuzará.
A Josué también mandé en aquel tiempo, diciendo: Tus ojos han visto todo lo que acaba de hacer Jehová tu Dios a estos dos reyes; así hará Jehová con todos los reinos adonde vas a pasar.
Hará Jehová que seas herido delante de tus enemigos. Por un solo camino saldrás contra ellos, mas por siete caminos huirás delante de ellos; y estarás sujeto a maltratamiento en todos los reinos de la tierra.
Y Salomón señoreaba todos los reinos desde el río Eufrates hasta la tierra de los Filisteos, y hasta el confín de Egipto; y ellos traían presentes, y servían a Salomón todos los días de su vida.
Así dice Ciro rey de Persia: Todos los reinos de la tierra me los ha dado Jehová, el Dios del cielo; y él me ha encargado que le edifique Casa en Jerusalem, que está en Judá.
Y los haré una sola nación en su tierra, sobre las serranías de Israel; y un solo Rey será rey de todos ellos; y nunca más serán dos naciones, ni nunca más estarán divididos en dos reinos;
y los entregaré al maltratamiento y a la desventura entre todos los reinos de la tierra; para ser un vituperio y un proverbio, un ludibrio y una execración en todos los lugares adonde los voy a arrojar.
¡Se oye estruendo de una multitud sobre las montañas, como de gente numerosa! estruendo de tumulto de los reinos de las naciones, que se juntan. ¡Jehová de los Ejércitos pasa revista a sus tropas para la guerra!
Además, les diste reinos y pueblos, y se los repartiste por distritos; de manera que tomaron en posesión la tierra de Sehón, es decir, la tierra del rey de Hesbón, y la tierra de Og rey de Basán.
Pasad a Calne, y ved; y de allí pasad adelante a Hamat la grande; luego descended a Gat de los Filisteos; ¿son acaso ellas mejores que estos reinos de Israel? ¿o es más grande su territorio que vuestro territorio?
¡Alzad bandera en la tierra! ¡tocad trompeta entre las naciones! ¡alistad contra ella las naciones! ¡convocad contra ella los reinos de Armenia, de Mini y de Askenaz! ¡nombrad jefe contra ella! ¡haced que suban contra ella caballos como orugas!
Y dijo a los hijos de Israel: Así dice Jehová el Dios de Israel: Yo hice subir a Israel de Egipto, y os libré de mano de los Egipcios, y de mano de todos los reinos que os han oprimido.
y dijo: Jehová, Dios de nuestros padres, ¿no eres tú Dios en el cielo? ¿y no gobiernas tú en todos los reinos de las naciones? En tu mano pues hay poder y fortaleza, y no hay quien te pueda resistir.
EL oráculo que tuvo Jeremías de parte de Jehová, cuando Nabucodonosor rey de Babilonia, y todo su ejército y todos los reinos de la tierra que había bajo su dominio, y todos los pueblos, peleaban contra Jerusalem y contra todas sus ciudades, el cual decía:
Empero en los días de aquellos reyes, el Dios del cielo establecerá un reino que nunca jamás será destruído, y el reino no será dejado a otro pueblo, sino que desmenuzará y acabará con todos aquellos reinos, en tanto que él mismo permanecerá para todos lossiglos;
Y los perseguiré con la espada y con el hambre y con la peste, y los entregaré al maltratamiento entre todos los reinos de la tierra; para que sean una execración, y un asombro, y un silbido y un vituperio entre todas las naciones adonde los habré echado;
Así los hijos de éstos entraron, y heredaron la tierra, en tanto que tú sujetaste delante de ellos a los habitantes de la tierra, los Cananeos, a quienes entregaste en su mano, con sus reinos y los pueblos de la tierra, para que hiciesen con ellos según su voluntad.
¡Oh Jehová de los Ejércitos, el Dios de Israel, que habitas entre los querubines! tú solo eres el Dios de todos los reinos de la tierra: tú hiciste los cielos y la tierra.
Pues he aquí que voy a convocar a todas las tribus de los reinos del norte, dice Jehová, las cuales vendrán, y pondrán cada cual su trono a la entrada de las puertas de Jerusalem, así contra todos sus muros a la redonda, como contra todas las ciudades de Judá.
Por tanto esperadme a mí, dice Jehová, hasta el día que me levante a la presa: porque es mi propósito reunir las naciones y juntar los reinos, para derramar sobre ellos mi indignación, es decir, todo el ardor de mi ira; pues con el ardor de mis celos será devorada toda la tierra.
Así dice Ciro rey de Persia: Todos los reinos de la tierra me los ha dado Jehová, el Dios del cielo; y me ha encargado que le edifique Casa en Jerusalem, que está en Judá. Quienquiera pues que haya entre vosotros de todo su pueblo, sea Jehová su Dios con él, para que suba allá.
Y oró Ezequías delante de Jehová, y dijo: ¡Oh Jehová, el Dios de Israel, que habitas entre los querubines! ¡tú solo eres el Dios de todos los reinos de la tierra: tú hiciste los cielos y la tierra!
Por tanto, así dice Jehová: Vosotros no me habéis escuchado para proclamar libertad cada uno a su hermano y cada uno a su prójimo; he aquí que yo voy a proclamaros a vosotros libertad, dice Jehová, para morir a espada y de peste y de hambre; y os entregaré al maltratamiento entre todos los reinos de la tierra.
Y el reino, y el dominio, y el señorío de los reinos por debajo de todos los cielos, será dado al pueblo de los santos del Altísimo, cuyo reino es un reino eterno; y todos los dominios le servirán y le obedecerán a él.
Por tanto, así dice Jehová el Señor: ¡Ay de la ciudad sanguinaria, la olla cuyo verdín está en ella, y cuyo verdín no sale de ella! ¡Saca pues cada una de las piezas! no cayó sobre ella suerte.
Luego quédese la olla sobre las ascuas vacía, para que se caliente, y para que se caldee el bronce de ella, y se derrita en medio de ella su suciedad, y se consuma su verdín.
En tu suciedad hay execrable lascivia: por cuanto yo te limpiaba, mas tú no fuiste limpiada, por tanto tu inmundicia no se limpiará más, hasta que yo haya desahogado mi indignación en ti.
Yo Jehová lo he dicho; ya viene, y yo lo haré. No aflojaré, ni perdonaré, ni tampoco me arrepentiré; conforme a tus caminos, y conforme a tus hechos, te juzgaré, dice Jehová el Señor.
Gime, mas en silencio; no harás el duelo de muertos; átate el turbante; y ponte el calzado en los pies; y no cubras el labio, ni comas el pan de hombres que están de luto.
Di a la casa de Israel: Así dice Jehová el Señor: He aquí que voy a profanar mi Santuario, el orgullo de vuestro poder, el deleite de vuestros ojos, y del cual tiene lástima vuestra alma; y vuestros hijos y vuestras hijas, a quienes dejasteis en la Judea, caerán a cuchillo.
vuestros turbantes estarán sobre vuestras cabezas, y vuestro calzado sobre vuestros pies: No plañiréis, ni lloraréis; sino que os desfalleceréis en vuestras iniquidades, y gemiréis, mirándoos los unos a los otros.
Ezequiel pues os servirá de tipo; conforme a todo lo que él ha hecho, haréis vosotros; y cuando esto sucediere, entonces conoceréis que yo soy Jehová el Señor.
Y tú, oh hijo del hombre, en el día que yo les quitare su fortaleza, y el gozo de su gloria, y el deleite de sus ojos, aquello también en que tienen puesto su corazón, es a saber, sus hijos y sus hijas;
En aquel día será abierta tu boca para con el haya escapado, de modo que hablarás, y no serás más mudo. Así tú les servirás de tipo; y conocerán que yo soy Jehová.
Dirás pues a los hijos de Ammón: ¡Oíd el oráculo de Jehová el Señor! Así dice Jehová el Señor: Por cuanto dijiste: ¡Ea! ¡ea! respecto de mi Santuario cuando fué profanado, y de la tierra de Israel cuando fué desolada, y de la casa de Judá, cuando ellos fueron en cautiverio;
por tanto, yo te entregaré a los hijos de Oriente, para posesión suya; los cuales asentarán en ti sus campamentos, y pondrán en ti sus moradas; comerán tu fruto y beberán tu leche.
por tanto, he aquí que yo voy a extender mi mano contra ti, y te entregaré para que seas un despojo a las naciones, y te cortaré de entre los pueblos, y te haré perecer de entre los países, y te destruiré; y conocerás que yo soy Jehová
por tanto, he aquí que voy a abrir el costado de Moab, por la parte de las ciudades (de sus ciudades que están en sus fronteras, la gloria del país, Bet-jesimot, Baal-meón y Kiryataim),
a los hijos de Oriente: se lo he dado por posesión suya; juntamente con los hijos de Ammón, para que de los hijos de Ammón no haya más memoria entre las naciones:
Así dice Jehová el Señor: A causa de lo que hizo Edom, en vengarse cruelmente de los hijos de Judá (pues gravemente ofendieron cuando se vengaron de ellos),
por tanto, así dice Jehová el Señor: Yo también extenderé mi mano contra Edom, y cortaré de ella hombre y bestia; y la tomaré en un desierto desde Temán; y hasta Dedán caerán a cuchillo.
Y descargaré mi venganza en Edom, por medio de mi pueblo Israel, los cuales han de hacer en Edom conforme a mi ira, y conforme a mi indignación; y los ldumeos conocerán mi venganza, dice Jehová el Señor.
Así dice Jehová el Señor: Por cuanto los Filisteos obraron con venganza, y se vengaron cruelmente con todo el desdén de su alma, destruyendo a causa del odio perpetuo;
por tanto, así dice Jehová el Señor: He aquí que voy a extender mi mano sobre los Filisteos, y cortaré a los Kereteos, y destruiré el resto que queda en la costa del mar.
Hijo del hombre, por cuanto dice Tiro contra Jerusalem: ¡Ea! ¡quebrantada está la que era puerta de los pueblos; se me ha vuelto a mí; yo estaré surtida, ahora que ella está asolada!
por tanto, así dice Jehová el Señor: He aquí que estoy contra ti, oh Tiro, y haré subir contra ti muchas naciones, a la manera que el mar hace subir sus olas;