Concordancia
- Juan 5 v. 35
- Él era una antorcha que ardía y resplandecía; y vosotros quisisteis alegraros por algún tiempo en su luz.
- Juan 5 v. 36
- Empero el testimonio que yo tengo mayor es que el de Juan; porque las obras que el Padre me ha dado que cumplir, las mismas obras que hago, dan testimonio de mí que el Padre me ha enviado.
- Juan 5 v. 37
- El Padre también que me envió, él mismo ha dado testimonio de mí. Vosotros nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su apariencia.
- Juan 5 v. 38
- Y no tenéis su palabra morando en vosotros; pues no creéis a quien él envió.
- Juan 5 v. 39
- Escudriñad las Escrituras, porque pensáis que en ellas tenéis vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;
- Juan 5 v. 40
- y no quereis venir a mí para que tengáis vida.
- Juan 5 v. 41
- Gloria por parte de los hombres no recibo.
- Juan 5 v. 42
- Mas yo os conozco, y sé que no tenéis el amor de Dios en vosotros.
- Juan 5 v. 43
- Yo he venido en el nombre de mi Padre, y no me recibís: si otro viniere en su propio nombre, a éste sí recibiréis.
- Juan 5 v. 44
- ¿Cómo podéis creer, vosotros que recibís gloria los unos de los otros, y no buscáis la gloria que solo de Dios viene?
- Juan 5 v. 45
- No penséis que os acusaré yo ante el Padre: vuestro acusador es Moisés, aquel en quien tenéis puesta vuestra esperanza.
- Juan 5 v. 46
- Pues si creyeseis a Moisés, me creeríais a mí: porque de mí escribió él.
- Juan 5 v. 47
- Mas si no creéis a sus escritos, ¿cómo creeréis a mis palabras?
- Juan 6 v. 1
- DESPUÉS de estas cosas Jesús se fué a la otra orilla del Mar de Galilea, que es el mar de Tiberias.
- Juan 6 v. 2
- Y le siguió una gran muchedumbre de gentes, porque veían los milagros que hacía en los enfermos.
- Juan 6 v. 3
- Mas Jesús se fué a la montaña, y allí se sentó con sus discípulos.
- Juan 6 v. 4
- (Y estaba cerca la Pascua, fiesta de los judíos.)
- Juan 6 v. 5
- Alzando, pues, Jesús los ojos, y viendo que una gran multitud venía hacia él, dijo a Felipe: ¿De dónde hemos de comprar pan para que éstos coman?
- Juan 6 v. 6
- Esto lo decía para probarle; pues él mismo sabía lo que iba a hacer.
- Juan 6 v. 7
- Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no les es suficiente, para que cada uno tome un poco.
- Juan 6 v. 8
- Dícele uno de sus discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro:
- Juan 6 v. 9
- Aquí está un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos: pero éstos ¿qué son entre tantos?
- Juan 6 v. 10
- Dijo Jesús: Haced que los hombres se recuesten: y había mucha hierba en aquel sitio. Se recostaron, pues, los hombres, hasta en número de cinco mil.
- Juan 6 v. 11
- Tomó entonces Jesús los panes, y habiendo dado gracias, repartió a los que estaban recostados: y asimismo les dió de los pececillos, cuanto querían.
- Juan 6 v. 12
- Y cuando estuvieron satisfechos, dijo a sus discípulos: Recoged los pedazos que sobran, para que no se pierda nada.
- Juan 6 v. 13
- Los recogieron, pues, y llenaron doce cestos de los pedazos de los cinco panes de cebada, que sobraron a los que habían comido.
- Juan 6 v. 14
- Por tanto aquellos hombres, cuando vieron el milagro que Jesús había hecho, decían: Este es verdaderamente el Profeta que había de venir al mundo.
- Juan 6 v. 15
- Jesús, pues, percibiendo que estaban a punto de venir y tomarle por fuerza, para hacerle rey, partió otra vez a la montaña, él solo.
- Juan 6 v. 16
- Y cuando era la tarde, sus discípulos bajaron al mar,
- Juan 6 v. 17
- y entraron en una barca, e iban atravesando el mar hacia Capernaum. Había ya obscurecido, y Jesús no había aún venido a ellos.
- Juan 6 v. 18
- Entretanto el mar se iba levantando, a causa de un gran viento que soplaba.
- Juan 6 v. 19
- Y cuando, pues, hubieron remado cosa de veinte o treinta estadios, ven a Jesús andando sobre el mar, y acercándose a la barca; y se asustaron.
- Juan 6 v. 20
- Mas él les dice: Yo soy; no tengáis miedo.
- Juan 6 v. 21
- Gustosos pues, le recibieron en le barca; y llegó luego la barca a la tierra adonde iban.
- Juan 6 v. 22
- Al día siguiente, la gente que estaba de la otra parte del mar, viendo que no había allí más que una sola barquichuela, y conociendo que entró en la barca con sus discípulos, sino que sus discípulos se habían ido solos;
- Juan 6 v. 23
- (sin embargo arribaron barquichuelas de Tiberias, cerca del lugar donde comieron el pan, después de haber dado gracias el Señor;)
- Juan 6 v. 24
- cuando, pues, la gente vió que Jesús no estaba allí ni tampoco sus discípulos, entraron ellos en las barquichuelas, y fueron a Capernaum, en busca de Jesús.
- Juan 6 v. 25
- Y hallándole al otro lado del mar, le dijeron: Rabbí ¿cuándo viniste acá?
- Juan 6 v. 26
- Respondióles Jesús y dijo: En verdad, en verdad os digo: Me buscáis, no porque visteis los milagros, sino porque comisteis de los panes, y os saciasteis.
- Juan 6 v. 27
- Trabajad, no por el alimento que perece, sino por el alimento que dura para vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre; pues a éste le selló el Padre, Dios.
- Juan 6 v. 28
- Ellos entonces le dijeron: ¿Qué hemos de hacer, para obrar las obras de Dios?
- Juan 6 v. 29
- Jesús respondió y les dijo: Ésta es la obra de Dios, que creáis en aquel a quien él envió.
- Juan 6 v. 30
- Dijéronle pues: ¿Qué señal haces tú, para que veamos y creamos? ¿qué obras tú?
- Juan 6 v. 31
- Nuestros padres comieron el maná en el desierto, según está escrito: Pan del cielo les dió a comer.
- Juan 6 v. 32
- Les dijo entonces Jesús: En verdad, en verdad os digo: No fué Moisés quien os dió el pan del cielo; mi Padre empero os da el verdadero pan del cielo.
- Juan 6 v. 33
- Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo, y da vida al mundo.
- Juan 6 v. 34
- Ellos por tanto le dijeron: Señor, danos siempre este pan.
- Juan 6 v. 35
- Díjoles Jesús: Yo soy el pan de la vida: el que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca jamás tendrá sed.
- Juan 6 v. 36
- Pero os he dicho ya que vosotros me habéis visto, y no creéis.
- Juan 6 v. 37
- Todo cuanto me da el Padre, a mí vendrá; y al que viene a mí, de ninguna manera le desecharé.
- Juan 6 v. 38
- Porque descendí del cielo no para hacer mi propia voluntad, sino la voluntad de aquel que me envió.
- Juan 6 v. 39
- Y ésta es la voluntad de aquel que me envió, que de cuanto me ha dado yo no pierda nada, sino que lo resucite en el día postrero.
- Juan 6 v. 40
- Pues que ésta es la voluntad de mi Padre, que todo aquel que ve al Hijo y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
- Juan 6 v. 41
- Por tanto los judíos murmuraban de él, porque dijo: Yo soy el pan que descendió del cielo.
- Juan 6 v. 42
- Y decían: ¿No es éste Jesús, hijo de José, cuyo padre y madre nosotros conocemos? ¿Cómo es que ahora dice: Yo he descendido del cielo?
- Juan 6 v. 43
- Jesús respondió, y les dijo: No murmuréis entre vosotros.
- Juan 6 v. 44
- Nadie puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere: y yo le resucitaré en el día postrero.
- Juan 6 v. 45
- Escrito está en los Profetas: Y todos ellos serán enseñados de Dios. Todo aquel que ha oído de parte del Padre, y ha aprendido de él, viene a mí.
- Juan 6 v. 46
- No que hombre alguno haya visto al Padre, con excepción de aquel que es de Dios: éste ha visto al Padre.
- Juan 6 v. 47
- En verdad, en verdad os digo: El que cree en mí tiene vida eterna.
- Juan 6 v. 48
- Yo soy el pan de la vida.
- Juan 6 v. 49
- Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y murieron:
- Juan 6 v. 50
- éste es el pan que desciende del cielo, para que uno pueda comer de él, y no morir.
- Juan 6 v. 51
- Yo soy el pan vivo que descendió del cielo: si alguno comiere de este pan, vivirá eternamente: y el pan que yo daré es mi carne, que doy por la vida del mundo.
- Juan 6 v. 52
- por tanto los judíos disputaron entre sí diciendo: ¿Cómo puede este hombre darnos su carne a comer?
- Juan 6 v. 53
- Jesús, pues, les dijo: En verdad, en verdad os digo: A menos que comáis la carne del Hijo del hombre, y bebáis su sangre, no tendréis vida en vosotros.
- Juan 6 v. 54
- El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
- Juan 6 v. 55
- Porque mi carne es verdadero alimento, y mi sangre es verdadera bebida.
- Juan 6 v. 56
- El que come mi carne y bebe mi sangre, mora en mí, y yo en él.
- Juan 6 v. 57
- Como el Padre viviente me envió, y yo vivo por medio del Padre, así el que me come, éste también vivirá por medio de mí.
- Juan 6 v. 58
- Éste es el pan que descendió del cielo: no como vuestros padres que comieron el maná, y murieron: el que come este pan, vivirá eternamente.
- Juan 6 v. 59
- Estas cosas dijo en la sinagoga, enseñando en Capernaum.
- Juan 6 v. 60
- Por tanto muchos de sus discípulos, al oír esto, dijeron: ¡Dura palabra es ésta! ¿quién la puede escuchar?
- Juan 6 v. 61
- Jesús empero, conociendo en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo: ¿Esto os escandaliza?
- Juan 6 v. 62
- ¿Pues qué, si viereis al Hijo del hombre subir a donde antes estaba?
- Juan 6 v. 63
- Es el espíritu el que da vida, la carne de nada aprovecha: las palabras que yo os he hablado espíritu y vida son.
- Juan 6 v. 64
- Mas hay algunos de vosotros que no creen. Pues desde el principio sabía Jesús quiénes eran los que no creían, y quién era aquel que le había de entregar.
- Juan 6 v. 65
- Y dijo: Por esto os he dicho que nadie puede venir a mí, a menos que le sea dado por mi Padre.
- Juan 6 v. 66
- Por esto muchos de sus discípulos se volvieron atrás, y ya no andaban más con él.
- Juan 6 v. 67
- Por tanto Jesús dijo a los doce: ¿No queréis iros vosotros también?
- Juan 6 v. 68
- Respondióle Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? ¡tú tienes las palabras de vida eterna:
- Juan 6 v. 69
- y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios vivo!
- Juan 6 v. 70
- Respondióles Jesús: ¿No os escogí yo a vosotros, los doce, y uno de vosotros es diablo?
- Juan 6 v. 71
- Lo decía del hijo de Simón, Judas Iscariote, porque era éste, siendo uno de los doce, quien le iba a entregar.
- Juan 7 v. 1
- Y DESPUÉS de estas cosas Jesús andaba en Galilea; pues no quería andar en Judea, porque los judíos procuraban matarle.
- Juan 7 v. 2
- Y estaba cerca la fiesta de los judíos, llamada de las Enramadas.
- Juan 7 v. 3
- Sus hermanos, pues, le dijeron: Parte de aquí, y véte a Judea, para que tus discípulos también vean las obras que haces;
- Juan 7 v. 4
- porque ninguno hace cosa en secreto, mientras él mismo procura ser conocido en público; si haces estas cosas, manifiéstate al mundo.
- Juan 7 v. 5
- Porque aun sus hermanos no creían en él.
- Juan 7 v. 6
- Jesús, por tanto, les dice: Mi tiempo no ha llegado todavía; mas vuestro tiempo siempre está listo.
- Juan 7 v. 7
- El mundo no puede odiaros a vosotros, mas a mí sí me odia, porque yo testifico de él que sus obras son malas.
- Juan 7 v. 8
- Subid vosotros a la fiesta: yo no subo todavía a esta fiesta, porque mi tiempo no está aún cumplido.
- Juan 7 v. 9
- Habiendo dicho estas cosas, permaneció todavía en Galilea.
- Juan 7 v. 10
- Mas cuando sus hermanos hubieron subido a la fiesta, entonces él también subió, no manifiestamente, sino como en secreto.
- Juan 7 v. 11
- Los judíos por tanto le buscaron en la fiesta, y decían: ¿Dónde está aquél?
- Juan 7 v. 12
- Y había mucho murmullo entre las multitudes respecto de él: algunos decían: ¡Es hombre bueno! otros decían: ¡No, sino que engaña al pueblo!
- Juan 7 v. 13
- Pero nadie hablaba francamente respecto de él por temor de los judíos.
- Juan 7 v. 14
- Mas estando ya a mediados de la fiesta, subió Jesús al Templo, y enseñaba.
- Juan 7 v. 15
- Y maravillábanse los judíos, diciendo: ¿Cómo sabe éste letras, sin habérsele nunca enseñado?
- Juan 7 v. 16
- Respondióles pues Jesús, y dijo: Mi enseñanza no es mía, sino de aquel que me envió.