Concordancia

content_copy Cantar de los Cantares 7 v. 11

¡Ven, amado mío, salgamos al campo; alojémonos en las aldeas;

content_copy Cantar de los Cantares 7 v. 12

y, madrugando para salir a las viñas, veamos si las vides han brotado y están en cierne; si los ganados han echado sus flores: allí te daré mis caricias.

content_copy Cantar de los Cantares 7 v. 13

¡Las mandrágoras despiden su fragancia, y junto a nuestras puertas están toda suerte de frutas exquisitas, tanto nuevas como añejas, que tengo guardadas para ti, oh amada mío!

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 1

¡OH si tú fueras como un hermano mío, hermanito que mama los pechos de mi misma madre! entonces, cuando te hallara fuera, te besara, y nadie me despreciaría por ello.

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 2

Te voy a conducir, te haré entrar en la casa de mi madre, para que tú me instruyas; te daré a beber vino bien sazonado, y el zumo de mis granadas.

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 3

¡Su izquierda estará debajo de mi cabeza. y su derecha me abrazará!

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 4

¡Yo os conjuro, oh hijas de Jerusalem, que no despertéis y que no quitéis el sueño a mi amada, hasta que ella quiera!

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 5

¿Quién es ésta que viene subiendo del desierto, apoyada en su amado? Debajo de este manzano te desperté yo; allí tu madre tuvo dolores de parto por ti, allí tuvo dolores de parto aquella que te dió a luz.

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 6

¡Ponme como sello sobre tu corazón, como sello sobre tu brazo! porque fuerte como la muerte es el amor, inexorables como el sepulcro son los celos: sus ascuas arden como ascuas de fuego, como la misma llama de Jehová!

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 7

¡Muchas aguas no pueden apagar el amor, ni los ríos lo pueden anegar: si un hombre diere todos los haberes de su casa por el amor, él sería completamente despreciado!

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 8

Tenemos una hermana pequeña, que aun no tiene pechos: ¿qué haremos con nuestra hermana en el día en que haya de ser pedida?

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 9

Si fuere firme como un muro, edificaremos sobre el tal muro una torrecilla de plata; mas si fuere una puerta abierta, cerraremos ésta con tablas de cedro.

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 10

¡Yo era como muro, y mis pechos como sus torres; por tanto he venido a ser, a los ojos de él, como quien halla la paz!

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 11

Salomón tenía una viña en Baal-hamón; arrendó la viña a los que la guardasen; cada uno por el fruto de ella había de traer mil siclos de plata.

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 12

Mi viña, la que es mía propia, está delante de mí: los mil siclos serán para ti, ¡oh Salomón! y doscientos deben de ser para los guardaron el fruto de ella.

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 13

¡Oh tú que habitas en los jardines, los compañeros escuchan tu voz; házmela oír a mí!

content_copy Cantar de los Cantares 8 v. 14

¡Date prisa, oh amado mío, y sé como el corzo o como el cervatillo, sobre las montañas de los aromas!