Concordancia
- Lucas 4 v. 31
- Descendió Jesús a Capernaum, ciudad de Galilea; y les enseñaba en los días de reposo.l
- Lucas 4 v. 32
- Y se admiraban de su doctrina, porque su palabra era con autoridad.m
- Lucas 4 v. 33
- Estaba en la sinagoga un hombre que tenía un espíritu de demonio inmundo, el cual exclamó a gran voz,
- Lucas 4 v. 34
- diciendo: Déjanos; ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Yo te conozco quién eres, el Santo de Dios.
- Lucas 4 v. 35
- Y Jesús le reprendió, diciendo: Cállate, y sal de él. Entonces el demonio, derribándole en medio de ellos, salió de él, y no le hizo daño alguno.
- Lucas 4 v. 36
- Y estaban todos maravillados, y hablaban unos a otros, diciendo: ¿Qué palabra es esta, que con autoridad y poder manda a los espíritus inmundos, y salen?
- Lucas 4 v. 37
- Y su fama se difundía por todos los lugares de los contornos.
- Lucas 4 v. 38
- Entonces Jesús se levantó y salió de la sinagoga, y entró en casa de Simón. La suegra de Simón tenía una gran fiebre; y le rogaron por ella.
- Lucas 4 v. 39
- E inclinándose hacia ella, reprendió a la fiebre; y la fiebre la dejó, y levantándose ella al instante, les servía.
- Lucas 4 v. 40
- Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diversas enfermedades los traían a él; y él, poniendo las manos sobre cada uno de ellos, los sanaba.
- Lucas 4 v. 41
- También salían demonios de muchos, dando voces y diciendo: Tú eres el Hijo de Dios. Pero él los reprendía y no les dejaba hablar, porque sabían que él era el Cristo.
- Lucas 4 v. 42
- Cuando ya era de día, salió y se fue a un lugar desierto; y la gente le buscaba, y llegando a donde estaba, le detenían para que no se fuera de ellos.
- Lucas 4 v. 43
- Pero él les dijo: Es necesario que también a otras ciudades anuncie el evangelio del reino de Dios; porque para esto he sido enviado.
- Lucas 4 v. 44
- Y predicaba en las sinagogas de Galilea.
- Lucas 5 v. 1
- Aconteció que estando Jesús junto al lago de Genesaret, el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios.
- Lucas 5 v. 2
- Y vio dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago; y los pescadores, habiendo descendido de ellas, lavaban sus redes.
- Lucas 5 v. 3
- Y entrando en una de aquellas barcas, la cual era de Simón, le rogó que la apartase de tierra un poco; y sentándose, enseñaba desde la barca a la multitud.a
- Lucas 5 v. 4
- Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.
- Lucas 5 v. 5
- Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado;b mas en tu palabra echaré la red.
- Lucas 5 v. 6
- Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces,c y su red se rompía.
- Lucas 5 v. 7
- Entonces hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca, para que viniesen a ayudarles; y vinieron, y llenaron ambas barcas, de tal manera que se hundían.
- Lucas 5 v. 8
- Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador.
- Lucas 5 v. 9
- Porque por la pesca que habían hecho, el temor se había apoderado de él, y de todos los que estaban con él,
- Lucas 5 v. 10
- y asimismo de Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: No temas; desde ahora serás pescador de hombres.
- Lucas 5 v. 11
- Y cuando trajeron a tierra las barcas, dejándolo todo, le siguieron.
- Lucas 5 v. 12
- Sucedió que estando él en una de las ciudades, se presentó un hombre lleno de lepra, el cual, viendo a Jesús, se postró con el rostro en tierra y le rogó, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.
- Lucas 5 v. 13
- Entonces, extendiendo él la mano, le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante la lepra se fue de él.
- Lucas 5 v. 14
- Y él le mandó que no lo dijese a nadie; sino ve, le dijo, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu purificación, según mandó Moisés,d para testimonio a ellos.
- Lucas 5 v. 15
- Pero su fama se extendía más y más; y se reunía mucha gente para oírle, y para que les sanase de sus enfermedades.
- Lucas 5 v. 16
- Mas él se apartaba a lugares desiertos, y oraba.
- Lucas 5 v. 17
- Aconteció un día, que él estaba enseñando, y estaban sentados los fariseos y doctores de la ley, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, de Judea y Jerusalén; y el poder del Señor estaba con él para sanar.
- Lucas 5 v. 18
- Y sucedió que unos hombres que traían en un lecho a un hombre que estaba paralítico, procuraban llevarle adentro y ponerle delante de él.
- Lucas 5 v. 19
- Pero no hallando cómo hacerlo a causa de la multitud, subieron encima de la casa, y por el tejado le bajaron con el lecho, poniéndole en medio, delante de Jesús.
- Lucas 5 v. 20
- Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados.
- Lucas 5 v. 21
- Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a cavilar, diciendo: ¿Quién es este que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino solo Dios?
- Lucas 5 v. 22
- Jesús entonces, conociendo los pensamientos de ellos, respondiendo les dijo: ¿Qué caviláis en vuestros corazones?
- Lucas 5 v. 23
- ¿Qué es más fácil, decir: Tus pecados te son perdonados, o decir: Levántate y anda?
- Lucas 5 v. 24
- Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa.
- Lucas 5 v. 25
- Al instante, levantándose en presencia de ellos, y tomando el lecho en que estaba acostado, se fue a su casa, glorificando a Dios.
- Lucas 5 v. 26
- Y todos, sobrecogidos de asombro, glorificaban a Dios; y llenos de temor, decían: Hoy hemos visto maravillas.
- Lucas 5 v. 27
- Después de estas cosas salió, y vio a un publicano llamado Leví, sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme.
- Lucas 5 v. 28
- Y dejándolo todo, se levantó y le siguió.
- Lucas 5 v. 29
- Y Leví le hizo gran banquete en su casa; y había mucha compañía de publicanos y de otros que estaban a la mesa con ellos.
- Lucas 5 v. 30
- Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores?e
- Lucas 5 v. 31
- Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.
- Lucas 5 v. 32
- No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento.
- Lucas 5 v. 33
- Entonces ellos le dijeron: ¿Por qué los discípulos de Juan ayunan muchas veces y hacen oraciones, y asimismo los de los fariseos, pero los tuyos comen y beben?
- Lucas 5 v. 34
- Él les dijo: ¿Podéis acaso hacer que los que están de bodas ayunen, entre tanto que el esposo está con ellos?
- Lucas 5 v. 35
- Mas vendrán días cuando el esposo les será quitado; entonces, en aquellos días ayunarán.
- Lucas 5 v. 36
- Les dijo también una parábola: Nadie corta un pedazo de un vestido nuevo y lo pone en un vestido viejo; pues si lo hace, no solamente rompe el nuevo, sino que el remiendo sacado de él no armoniza con el viejo.
- Lucas 5 v. 37
- Y nadie echa vino nuevo en odres viejos; de otra manera, el vino nuevo romperá los odres y se derramará, y los odres se perderán.
- Lucas 5 v. 38
- Mas el vino nuevo en odres nuevos se ha de echar; y lo uno y lo otro se conservan.
- Lucas 5 v. 39
- Y ninguno que beba del añejo, quiere luego el nuevo; porque dice: El añejo es mejor.
- Lucas 6 v. 1
- Aconteció en un día de reposo,a que pasando Jesús por los sembrados, sus discípulos arrancaban espigas y comían,b restregándolas con las manos.
- Lucas 6 v. 2
- Y algunos de los fariseos les dijeron: ¿Por qué hacéis lo que no es lícito hacer en los días de reposo?c
- Lucas 6 v. 3
- Respondiendo Jesús, les dijo: ¿Ni aun esto habéis leído, lo que hizo David cuando tuvo hambre él, y los que con él estaban;
- Lucas 6 v. 4
- cómo entró en la casa de Dios, y tomó los panes de la proposición, de los cuales no es lícito comer sino solo a los sacerdotes,d y comió, y dio también a los que estaban con él?e
- Lucas 6 v. 5
- Y les decía: El Hijo del Hombre es Señor aun del día de reposo.f
- Lucas 6 v. 6
- Aconteció también en otro día de reposo,g que él entró en la sinagoga y enseñaba; y estaba allí un hombre que tenía seca la mano derecha.
- Lucas 6 v. 7
- Y le acechaban los escribas y los fariseos, para ver si en el día de reposoh lo sanaría, a fin de hallar de qué acusarle.
- Lucas 6 v. 8
- Mas él conocía los pensamientos de ellos; y dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate, y ponte en medio. Y él, levantándose, se puso en pie.
- Lucas 6 v. 9
- Entonces Jesús les dijo: Os preguntaré una cosa: ¿Es lícito en día de reposoi hacer bien, o hacer mal?, ¿salvar la vida, o quitarla?
- Lucas 6 v. 10
- Y mirándolos a todos alrededor, dijo al hombre: Extiende tu mano. Y él lo hizo así, y su mano fue restaurada.
- Lucas 6 v. 11
- Y ellos se llenaron de furor, y hablaban entre sí qué podrían hacer contra Jesús.
- Lucas 6 v. 12
- En aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios.
- Lucas 6 v. 13
- Y cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales también llamó apóstoles:
- Lucas 6 v. 14
- a Simón, a quien también llamó Pedro, a Andrés su hermano, Jacobo y Juan, Felipe y Bartolomé,
- Lucas 6 v. 15
- Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Simón llamado Zelote,
- Lucas 6 v. 16
- Judas hermano de Jacobo, y Judas Iscariote, que llegó a ser el traidor.
- Lucas 6 v. 17
- Y descendió con ellos, y se detuvo en un lugar llano, en compañía de sus discípulos y de una gran multitud de gente de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón, que había venido para oírle, y para ser sanados de sus enfermedades;
- Lucas 6 v. 18
- y los que habían sido atormentados de espíritus inmundos eran sanados.
- Lucas 6 v. 19
- Y toda la gente procuraba tocarle, porque poder salía de él y sanaba a todos.
- Lucas 6 v. 20
- Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios.
- Lucas 6 v. 21
- Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.
- Lucas 6 v. 22
- Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre.j
- Lucas 6 v. 24
- Mas ¡ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo.
- Lucas 6 v. 25
- ¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados! porque tendréis hambre. ¡Ay de vosotros, los que ahora reís! porque lamentaréis y lloraréis.
- Lucas 6 v. 26
- ¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas.
- Lucas 6 v. 27
- Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen;
- Lucas 6 v. 28
- bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian.
- Lucas 6 v. 29
- Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues.
- Lucas 6 v. 30
- A cualquiera que te pida, dale; y al que tome lo que es tuyo, no pidas que te lo devuelva.
- Lucas 6 v. 31
- Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos.
- Lucas 6 v. 32
- Porque si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman.
- Lucas 6 v. 33
- Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo.
- Lucas 6 v. 34
- Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto.
- Lucas 6 v. 35
- Amad, pues, a vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos.
- Lucas 6 v. 36
- Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.
- Lucas 6 v. 37
- No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.
- Lucas 6 v. 38
- Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir.
- Lucas 6 v. 39
- Y les decía una parábola: ¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en el hoyo?l
- Lucas 6 v. 40
- El discípulo no es superior a su maestro;m mas todo el que fuere perfeccionado, será como su maestro.
- Lucas 6 v. 41
- ¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?
- Lucas 6 v. 42
- ¿O cómo puedes decir a tu hermano: Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo, no mirando tú la viga que está en el ojo tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.
- Lucas 6 v. 43
- No es buen árbol el que da malos frutos, ni árbol malo el que da buen fruto.
- Lucas 6 v. 44
- Porque cada árbol se conoce por su fruto;n pues no se cosechan higos de los espinos, ni de las zarzas se vendimian uvas.
- Lucas 6 v. 45
- El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca.o
- Lucas 6 v. 46
- ¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo?
- Lucas 6 v. 47
- Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicaré a quién es semejante.
- Lucas 6 v. 48
- Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca.