Concordancia
- Marcos 3 v. 30
- Porque ellos habían dicho: Tiene espíritu inmundo.
- Marcos 3 v. 31
- Vienen después sus hermanos y su madre, y quedándose afuera, enviaron a llamarle.
- Marcos 3 v. 32
- Y la gente que estaba sentada alrededor de él le dijo: Tu madre y tus hermanos están afuera, y te buscan.
- Marcos 3 v. 33
- Él les respondió diciendo: ¿Quién es mi madre y mis hermanos?
- Marcos 3 v. 34
- Y mirando a los que estaban sentados alrededor de él, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos.
- Marcos 3 v. 35
- Porque todo aquel que hace la voluntad de Dios, ese es mi hermano, y mi hermana, y mi madre.
- Marcos 4 v. 1
- Otra vez comenzó Jesús a enseñar junto al mar, y se reunió alrededor de él mucha gente, tanto que entrando en una barca, se sentó en ella en el mar;a y toda la gente estaba en tierra junto al mar.
- Marcos 4 v. 2
- Y les enseñaba por parábolas muchas cosas, y les decía en su doctrina:
- Marcos 4 v. 3
- Oíd: He aquí, el sembrador salió a sembrar;
- Marcos 4 v. 4
- y al sembrar, aconteció que una parte cayó junto al camino, y vinieron las aves del cielo y la comieron.
- Marcos 4 v. 5
- Otra parte cayó en pedregales, donde no tenía mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra.
- Marcos 4 v. 6
- Pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.
- Marcos 4 v. 7
- Otra parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron y la ahogaron, y no dio fruto.
- Marcos 4 v. 8
- Pero otra parte cayó en buena tierra, y dio fruto, pues brotó y creció, y produjo a treinta, a sesenta, y a ciento por uno.
- Marcos 4 v. 9
- Entonces les dijo: El que tiene oídos para oír, oiga.
- Marcos 4 v. 10
- Cuando estuvo solo, los que estaban cerca de él con los doce le preguntaron sobre la parábola.
- Marcos 4 v. 11
- Y les dijo: A vosotros os es dado saber el misterio del reino de Dios; mas a los que están fuera, por parábolas todas las cosas;
- Marcos 4 v. 12
- para que viendo, vean y no perciban; y oyendo, oigan y no entiendan; para que no se conviertan, y les sean perdonados los pecados.b
- Marcos 4 v. 13
- Y les dijo: ¿No sabéis esta parábola? ¿Cómo, pues, entenderéis todas las parábolas?
- Marcos 4 v. 14
- El sembrador es el que siembra la palabra.
- Marcos 4 v. 15
- Y estos son los de junto al camino: en quienes se siembra la palabra, pero después que la oyen, en seguida viene Satanás, y quita la palabra que se sembró en sus corazones.
- Marcos 4 v. 16
- Estos son asimismo los que fueron sembrados en pedregales: los que cuando han oído la palabra, al momento la reciben con gozo;
- Marcos 4 v. 17
- pero no tienen raíz en sí, sino que son de corta duración, porque cuando viene la tribulación o la persecución por causa de la palabra, luego tropiezan.
- Marcos 4 v. 18
- Estos son los que fueron sembrados entre espinos: los que oyen la palabra,
- Marcos 4 v. 19
- pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
- Marcos 4 v. 20
- Y estos son los que fueron sembrados en buena tierra: los que oyen la palabra y la reciben, y dan fruto a treinta, a sesenta, y a ciento por uno.
- Marcos 4 v. 21
- También les dijo: ¿Acaso se trae la luz para ponerla debajo del almud, o debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero?c
- Marcos 4 v. 22
- Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz.d
- Marcos 4 v. 23
- Si alguno tiene oídos para oír, oiga.
- Marcos 4 v. 24
- Les dijo también: Mirad lo que oís; porque con la medida con que medís, os será medido,e y aun se os añadirá a vosotros los que oís.
- Marcos 4 v. 25
- Porque al que tiene, se le dará; y al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.f
- Marcos 4 v. 26
- Decía además: Así es el reino de Dios, como cuando un hombre echa semilla en la tierra;
- Marcos 4 v. 27
- y duerme y se levanta, de noche y de día, y la semilla brota y crece sin que él sepa cómo.
- Marcos 4 v. 28
- Porque de suyo lleva fruto la tierra, primero hierba, luego espiga, después grano lleno en la espiga;
- Marcos 4 v. 29
- y cuando el fruto está maduro, en seguida se mete la hoz, porque la siega ha llegado.
- Marcos 4 v. 30
- Decía también: ¿A qué haremos semejante el reino de Dios, o con qué parábola lo compararemos?
- Marcos 4 v. 31
- Es como el grano de mostaza, que cuando se siembra en tierra, es la más pequeña de todas las semillas que hay en la tierra;
- Marcos 4 v. 32
- pero después de sembrado, crece, y se hace la mayor de todas las hortalizas, y echa grandes ramas, de tal manera que las aves del cielo pueden morar bajo su sombra.
- Marcos 4 v. 33
- Con muchas parábolas como estas les hablaba la palabra, conforme a lo que podían oír.
- Marcos 4 v. 34
- Y sin parábolas no les hablaba; aunque a sus discípulos en particular les declaraba todo.
- Marcos 4 v. 35
- Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado.
- Marcos 4 v. 36
- Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas.
- Marcos 4 v. 37
- Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba.
- Marcos 4 v. 38
- Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?
- Marcos 4 v. 39
- Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza.
- Marcos 4 v. 40
- Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?
- Marcos 4 v. 41
- Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es este, que aun el viento y el mar le obedecen?
- Marcos 5 v. 1
- Vinieron al otro lado del mar, a la región de los gadarenos.
- Marcos 5 v. 2
- Y cuando salió él de la barca, en seguida vino a su encuentro, de los sepulcros, un hombre con un espíritu inmundo,
- Marcos 5 v. 3
- que tenía su morada en los sepulcros, y nadie podía atarle, ni aun con cadenas.
- Marcos 5 v. 4
- Porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, mas las cadenas habían sido hechas pedazos por él, y desmenuzados los grillos; y nadie le podía dominar.
- Marcos 5 v. 5
- Y siempre, de día y de noche, andaba dando voces en los montes y en los sepulcros, e hiriéndose con piedras.
- Marcos 5 v. 6
- Cuando vio, pues, a Jesús de lejos, corrió, y se arrodilló ante él.
- Marcos 5 v. 7
- Y clamando a gran voz, dijo: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes.
- Marcos 5 v. 8
- Porque le decía: Sal de este hombre, espíritu inmundo.
- Marcos 5 v. 9
- Y le preguntó: ¿Cómo te llamas? Y respondió diciendo: Legión me llamo; porque somos muchos.
- Marcos 5 v. 10
- Y le rogaba mucho que no los enviase fuera de aquella región.
- Marcos 5 v. 11
- Estaba allí cerca del monte un gran hato de cerdos paciendo.
- Marcos 5 v. 12
- Y le rogaron todos los demonios, diciendo: Envíanos a los cerdos para que entremos en ellos.
- Marcos 5 v. 13
- Y luego Jesús les dio permiso. Y saliendo aquellos espíritus inmundos, entraron en los cerdos, los cuales eran como dos mil; y el hato se precipitó en el mar por un despeñadero, y en el mar se ahogaron.
- Marcos 5 v. 14
- Y los que apacentaban los cerdos huyeron, y dieron aviso en la ciudad y en los campos. Y salieron a ver qué era aquello que había sucedido.
- Marcos 5 v. 15
- Vienen a Jesús, y ven al que había sido atormentado del demonio, y que había tenido la legión, sentado, vestido y en su juicio cabal; y tuvieron miedo.
- Marcos 5 v. 16
- Y les contaron los que lo habían visto, cómo le había acontecido al que había tenido el demonio, y lo de los cerdos.
- Marcos 5 v. 17
- Y comenzaron a rogarle que se fuera de sus contornos.
- Marcos 5 v. 18
- Al entrar él en la barca, el que había estado endemoniado le rogaba que le dejase estar con él.
- Marcos 5 v. 19
- Mas Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti.
- Marcos 5 v. 20
- Y se fue, y comenzó a publicar en Decápolis cuán grandes cosas había hecho Jesús con él; y todos se maravillaban.
- Marcos 5 v. 21
- Pasando otra vez Jesús en una barca a la otra orilla, se reunió alrededor de él una gran multitud; y él estaba junto al mar.
- Marcos 5 v. 22
- Y vino uno de los principales de la sinagoga, llamado Jairo; y luego que le vio, se postró a sus pies,
- Marcos 5 v. 23
- y le rogaba mucho, diciendo: Mi hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para que sea salva, y vivirá.
- Marcos 5 v. 24
- Fue, pues, con él; y le seguía una gran multitud, y le apretaban.
- Marcos 5 v. 25
- Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre,
- Marcos 5 v. 26
- y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor,
- Marcos 5 v. 27
- cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto.
- Marcos 5 v. 28
- Porque decía: Si tocare tan solamente su manto, seré salva.
- Marcos 5 v. 29
- Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote.
- Marcos 5 v. 30
- Luego Jesús, conociendo en sí mismo el poder que había salido de él, volviéndose a la multitud, dijo: ¿Quién ha tocado mis vestidos?
- Marcos 5 v. 31
- Sus discípulos le dijeron: Ves que la multitud te aprieta, y dices: ¿Quién me ha tocado?
- Marcos 5 v. 32
- Pero él miraba alrededor para ver quién había hecho esto.
- Marcos 5 v. 33
- Entonces la mujer, temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de él, y le dijo toda la verdad.
- Marcos 5 v. 34
- Y él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote.
- Marcos 5 v. 35
- Mientras él aún hablaba, vinieron de casa del principal de la sinagoga, diciendo: Tu hija ha muerto; ¿para qué molestas más al Maestro?
- Marcos 5 v. 36
- Pero Jesús, luego que oyó lo que se decía, dijo al principal de la sinagoga: No temas, cree solamente.
- Marcos 5 v. 37
- Y no permitió que le siguiese nadie sino Pedro, Jacobo, y Juan hermano de Jacobo.
- Marcos 5 v. 38
- Y vino a casa del principal de la sinagoga, y vio el alboroto y a los que lloraban y lamentaban mucho.
- Marcos 5 v. 39
- Y entrando, les dijo: ¿Por qué alborotáis y lloráis? La niña no está muerta, sino duerme.
- Marcos 5 v. 40
- Y se burlaban de él. Mas él, echando fuera a todos, tomó al padre y a la madre de la niña, y a los que estaban con él, y entró donde estaba la niña.
- Marcos 5 v. 41
- Y tomando la mano de la niña, le dijo: Talita cumi; que traducido es: Niña, a ti te digo, levántate.
- Marcos 5 v. 42
- Y luego la niña se levantó y andaba, pues tenía doce años. Y se espantaron grandemente.
- Marcos 5 v. 43
- Pero él les mandó mucho que nadie lo supiese, y dijo que se le diese de comer.
- Marcos 6 v. 1
- Salió Jesús de allí y vino a su tierra, y le seguían sus discípulos.
- Marcos 6 v. 2
- Y llegado el día de reposo,a comenzó a enseñar en la sinagoga; y muchos, oyéndole, se admiraban, y decían: ¿De dónde tiene este estas cosas? ¿Y qué sabiduría es esta que le es dada, y estos milagros que por sus manos son hechos?
- Marcos 6 v. 3
- ¿No es este el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? Y se escandalizaban de él.
- Marcos 6 v. 4
- Mas Jesús les decía: No hay profeta sin honra sino en su propia tierra,b y entre sus parientes, y en su casa.
- Marcos 6 v. 5
- Y no pudo hacer allí ningún milagro, salvo que sanó a unos pocos enfermos, poniendo sobre ellos las manos.
- Marcos 6 v. 6
- Y estaba asombrado de la incredulidad de ellos. Y recorría las aldeas de alrededor, enseñando.
- Marcos 6 v. 7
- Después llamó a los doce, y comenzó a enviarlos de dos en dos; y les dio autoridad sobre los espíritus inmundos.
- Marcos 6 v. 8
- Y les mandóc que no llevasen nada para el camino, sino solamente bordón; ni alforja, ni pan, ni dinero en el cinto,
- Marcos 6 v. 9
- sino que calzasen sandalias, y no vistiesen dos túnicas.
- Marcos 6 v. 10
- Y les dijo: Dondequiera que entréis en una casa, posad en ella hasta que salgáis de aquel lugar.