Concordancia
- Mateo 24 v. 37
- Mas como los días de Noé, así será la venida del Hijo del hombre.
- Mateo 24 v. 38
- Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día que Noé entró en el arca,
- Mateo 24 v. 39
- Y no conocieron hasta que vino el diluvio y llevó á todos, así será también la venida del Hijo del hombre.
- Mateo 24 v. 40
- Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado:
- Mateo 24 v. 41
- Dos mujeres moliendo á un molinillo; la una será tomada, y la otra será dejada.
- Mateo 24 v. 42
- Velad pues, porque no sabéis á qué hora ha de venir vuestro Señor.
- Mateo 24 v. 43
- Esto empero sabed, que si el padre de la familia supiese á cuál vela el ladrón había de venir, velaría, y no dejaría minar su casa.
- Mateo 24 v. 44
- Por tanto, también vosotros estad apercibidos; porque el Hijo del hombre ha de venir á la hora que no pensáis.
- Mateo 24 v. 45
- ¿Quién pues es el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su familia para que les dé alimento á tiempo?
- Mateo 24 v. 46
- Bienaventurado aquel siervo, al cual, cuando su señor viniere, le hallare haciendo así.
- Mateo 24 v. 47
- De cierto os digo, que sobre todos sus bienes le pondrá.
- Mateo 24 v. 48
- Y si aquel siervo malo dijere en su corazón Mi señor se tarda en venir:
- Mateo 24 v. 49
- Y comenzare á herir á sus consiervos, y aun á comer y á beber con los borrachos;
- Mateo 24 v. 50
- Vendrá el señor de aquel siervo en el día que no espera, y á la hora que no sabe,
- Mateo 24 v. 51
- Y le cortará por medio, y pondrá su parte con los hipócritas: allí será el lloro y el crujir de dientes.
- Mateo 25 v. 2
- Y las cinco de ellas eran prudentes, y las cinco fatuas.
- Mateo 25 v. 3
- Las que eran fatuas, tomando sus lámparas, no tomaron consigo aceite;
- Mateo 25 v. 4
- Mas las prudentes tomaron aceite en sus vasos, juntamente con sus lámparas.
- Mateo 25 v. 5
- Y tardándose el esposo, cabecearon todas, y se durmieron.
- Mateo 25 v. 6
- Y á la media noche fué oído un clamor: He aquí, el esposo viene; salid á recibirle.
- Mateo 25 v. 7
- Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y aderezaron sus lámparas.
- Mateo 25 v. 8
- Y las fatuas dijeron á las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan.
- Mateo 25 v. 9
- Mas las prudentes respondieron, diciendo. Porque no nos falte á nosotras y á vosotras, id antes á los que venden, y comprad para vosotras.
- Mateo 25 v. 10
- Y mientras que ellas iban á comprar, vino el esposo; y las que estaban apercibidas, entraron con él á las bodas; y se cerró la puerta.
- Mateo 25 v. 11
- Y después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: Señor, Señor, ábrenos.
- Mateo 25 v. 12
- Mas respondiendo él, dijo: De cierto os digo, que no os conozco.
- Mateo 25 v. 13
- Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del hombre ha de venir.
- Mateo 25 v. 15
- Y á éste dió cinco talentos, y al otro dos, y al otro uno: á cada uno conforme á su facultad; y luego se partió lejos.
- Mateo 25 v. 16
- Y el que había recibido cinco talentos se fué, y granjeó con ellos, é hizo otros cinco talentos.
- Mateo 25 v. 17
- Asimismo el que había recibido dos, ganó también él otros dos.
- Mateo 25 v. 18
- Mas el que había recibido uno, fué y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor.
- Mateo 25 v. 19
- Y después de mucho tiempo, vino el señor de aquellos siervos, é hizo cuentas con ellos.
- Mateo 25 v. 20
- Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; he aquí otros cinco talentos he ganado sobre ellos.
- Mateo 25 v. 21
- Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré: entra en el gozo de tu señor.
- Mateo 25 v. 22
- Y llegando también el que había recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; he aquí otros dos talentos he ganado sobre ellos.
- Mateo 25 v. 23
- Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré: entra en el gozo de tu señor.
- Mateo 25 v. 24
- Y llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste, y recoges donde no esparciste;
- Mateo 25 v. 25
- Y tuve miedo, y fuí, y escondí tu talento en la tierra: he aquí tienes lo que es tuyo.
- Mateo 25 v. 26
- Y respondiendo su señor, le dijo: Malo y negligente siervo, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí;
- Mateo 25 v. 27
- Por tanto te convenía dar mi dinero á los banqueros, y viniendo yo, hubiera recibido lo que es mío con usura.
- Mateo 25 v. 28
- Quitadle pues el talento, y dadlo al que tiene diez talentos.
- Mateo 25 v. 29
- Porque á cualquiera que tuviere, le será dado, y tendrá más; y al que no tuviere, aun lo que tiene le será quitado.
- Mateo 25 v. 30
- Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera: allí será el lloro y el crujir de dientes.
- Mateo 25 v. 31
- Y cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria.
- Mateo 25 v. 32
- Y serán reunidas delante de él todas las gentes: y los apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.
- Mateo 25 v. 33
- Y pondrá las ovejas á su derecha, y los cabritos á la izquierda.
- Mateo 25 v. 34
- Entonces el Rey dirá á los que estarán á su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.
- Mateo 25 v. 35
- Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fuí huésped, y me recogisteis;
- Mateo 25 v. 36
- Desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; estuve en la cárcel, y vinisteis á mí.
- Mateo 25 v. 37
- Entonces los justos le responderán, diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos? ¿ó sediento, y te dimos de beber?
- Mateo 25 v. 38
- ¿Y cuándo te vimos huésped, y te recogimos? ¿ó desnudo, y te cubrimos?
- Mateo 25 v. 39
- ¿Ó cuándo te vimos enfermo, ó en la cárcel, y vinimos á ti?
- Mateo 25 v. 40
- Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis á uno de estos mis hermanos pequeñitos, á mí lo hicisteis.
- Mateo 25 v. 41
- Entonces dirá también á los que estarán á la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y para sus ángeles:
- Mateo 25 v. 42
- Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber;
- Mateo 25 v. 43
- Fuí huésped, y no me recogisteis; desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.
- Mateo 25 v. 44
- Entonces también ellos le responderán, diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, ó sediento, ó huésped, ó desnudo, ó enfermo, ó en la cárcel, y no te servimos?
- Mateo 25 v. 45
- Entonces les responderá, diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis á uno de estos pequeñitos, ni á mí lo hicisteis.
- Mateo 25 v. 46
- É irán éstos al tormento eterno, y los justos á la vida eterna.
- Mateo 26 v. 1
- Y ACONTECIÓ que, como hubo acabado Jesús todas estas palabras, dijo á sus discípulos:
- Mateo 26 v. 2
- Sabéis que dentro de dos días se hace la pascua, y el Hijo del hombre es entregado para ser crucificado.
- Mateo 26 v. 3
- Entonces los príncipes de los sacerdotes, y los escribas, y los ancianos del pueblo se juntaron al patio del pontífice, el cual se llamaba Caifás;
- Mateo 26 v. 4
- Y tuvieron consejo para prender por engaño á Jesús, y matarle.
- Mateo 26 v. 5
- Y decían: No en el día de la fiesta, porque no se haga alboroto en el pueblo.
- Mateo 26 v. 6
- Y estando Jesús en Bethania, en casa de Simón el leproso,
- Mateo 26 v. 7
- Vino á él una mujer, teniendo un vaso de alabastro de ungüento de gran precio, y lo derramó sobre la cabeza de él, estando sentado á la mesa.
- Mateo 26 v. 8
- Lo cual viendo sus discípulos, se enojaron, diciendo: ¿Por qué se pierde esto?
- Mateo 26 v. 9
- Porque esto se podía vender por gran precio, y darse á los pobres.
- Mateo 26 v. 10
- Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Por qué dais pena á esta mujer? Pues ha hecho conmigo buena obra.
- Mateo 26 v. 11
- Porque siempre tendréis pobres con vosotros, mas á mí no siempre me tendréis.
- Mateo 26 v. 12
- Porque echando este ungüento sobre mi cuerpo, para sepultarme lo ha hecho.
- Mateo 26 v. 13
- De cierto os digo, que donde quiera que este evangelio fuere predicado en todo el mundo, también será dicho para memoria de ella, lo que ésta ha hecho.
- Mateo 26 v. 14
- Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fué á los príncipes de los sacerdotes,
- Mateo 26 v. 15
- Y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le señalaron treinta piezas de plata.
- Mateo 26 v. 16
- Y desde entonces buscaba oportunidad para entregarle.
- Mateo 26 v. 17
- Y el primer día de la fiesta de los panes sin levadura, vinieron los discípulos á Jesús, diciéndole: ¿Dónde quieres que aderecemos para ti para comer la pascua?
- Mateo 26 v. 18
- Y él dijo: Id á la ciudad á cierto hombre, y decidle: El Maestro dice: Mi tiempo está cerca; en tu casa haré la pascua con mis discípulos.
- Mateo 26 v. 19
- Y los discípulos hicieron como Jesús les mandó, y aderezaron la pascua.
- Mateo 26 v. 20
- Y como fué la tarde del día, se sentó á la mesa con los doce.
- Mateo 26 v. 21
- Y comiendo ellos, dijo: De cierto os digo, que uno de vosotros me ha de entregar.
- Mateo 26 v. 22
- Y entristecidos ellos en gran manera, comenzó cada uno de ellos á decirle: ¿Soy yo, Señor?
- Mateo 26 v. 23
- Entonces él respondiendo, dijo: El que mete la mano conmigo en el plato, ése me ha de entregar.
- Mateo 26 v. 24
- Á la verdad el Hijo del hombre va, como está escrito de él, mas ¡ay de aquel hombre por quien el Hijo del hombre es entregado! bueno le fuera al tal hombre no haber nacido.
- Mateo 26 v. 25
- Entonces respondiendo Judas, que le entregaba, dijo. ¿Soy yo, Maestro? Dícele: Tú lo has dicho.
- Mateo 26 v. 26
- Y comiendo ellos, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dió á sus discípulos, y dijo: Tomad, comed. esto es mi cuerpo.
- Mateo 26 v. 27
- Y tomando el vaso, y hechas gracias, les dió, diciendo: Bebed de él todos;
- Mateo 26 v. 28
- Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, la cual es derramada por muchos para remisión de los pecados.
- Mateo 26 v. 29
- Y os digo, que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día, cuando lo tengo de beber nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.
- Mateo 26 v. 30
- Y habiendo cantado el himno, salieron al monte de las Olivas.
- Mateo 26 v. 31
- Entonces Jesús les dice: Todos vosotros seréis escandalizados en mí esta noche; porque escrito está: Heriré al Pastor, y las ovejas de la manada serán dispersas.
- Mateo 26 v. 32
- Mas después que haya resucitado, iré delante de vosotros á Galilea.
- Mateo 26 v. 33
- Y respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos sean escandalizados en ti, yo nunca seré escandalizado.
- Mateo 26 v. 34
- Jesús le dice: De cierto te digo que esta noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces.
- Mateo 26 v. 35
- Dícele Pedro. Aunque me sea menester morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo mismo.
- Mateo 26 v. 36
- Entonces llegó Jesús con ellos á la aldea que se llama Gethsemaní, y dice á sus discípulos: Sentaos aquí, hasta que vaya allí y ore.
- Mateo 26 v. 37
- Y tomando á Pedro, y á los dos hijos de Zebedeo, comenzó á entristecerse y á angustiarse en gran manera.
- Mateo 26 v. 38
- Entonces Jesús les dice: Mi alma está muy triste hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo.
- Mateo 26 v. 39
- Y yéndose un poco más adelante, se postró sobre su rostro, orando, y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí este vaso; empero no como yo quiero, sino como tú.
- Mateo 26 v. 40
- Y vino á sus discípulos, y los halló durmiendo, y dijo á Pedro: ¿Así no habéis podido velar conmigo una hora?
- Mateo 26 v. 41
- Velad y orad, para que no entréis en tentación: el espíritu á la verdad está presto, mas la carne enferma.